¿Qué le ocurre a nuestro huevo? ¿Por qué se queda en medio del agua sin flotar o hundirse? 🤔 Descubre su misterio.
¿Qué pasa cuando pones un huevo en un vaso de agua normal? Descubre una increíble forma de aprender algo nuevo sobre la densidad. Reflexionar sobre la flotabilidad de los objetos según la densidad del líquido donde se sumerja.
Hay que avisar que llegar a lograr que este experimento sea un éxito es una mezcla de seguir las instrucciones y un poco de maña de tu parte (no es necesaria suerte). Si haces las cosas bien podrás conseguir que el huevo quede suspendido a media altura en el agua sin flotar en la superficie ni caer al fondo.
Si no lo logras a la primera, es probable que debas empezar de nuevo. Ten paciencia y cuidado.
El huevo es más denso que el agua corriente (más moléculas por centímetro cúbico), esto hace que se hunda. Cuando empiezas a disolver la sal en el agua, esto aumenta la densidad (añadiendo más moléculas por centímetro cúbico). Al final, el agua se vuelve más densa que el huevo haciendo que acabe flotando. Cuando añades otra vez agua del grifo con cuidado, este agua normal es menos densa que el agua salada por lo que flota justo en medio de ambas.
Si el concepto de densidad sigue pareciéndote algo extraño, imagina que tenemos una máquina prodigiosa que es capaz de aumentar increíblemente la materia. Al hacerlo la máquina nos permite extraer un cubo de la sustancia que hemos agrandado y ver los átomos y moléculas que lo componen del tamaño de pelotas de tenis.
Con nuestra máquina aumentaríamos agua salada y agua dulce tomando de cada tipo de agua un cubo del mismo tamaño. En el interior de cada una de esos cubos podríamos comprobar que el agua salada tendría muchas más “pelotas de tenis” que el agua normal. Eso nos haría entender sin necesidad de usar una báscula que aunque los dos cubos tienen el mismo volumen, el agua salada pesa más que el agua normal.
Fuente: ⚓ Science Fun For Everyone