Crea "nieve templada" sin congelador
Únicamente con un pañal, un poco de paciencia y trabajo, y algo de agua, seremos capaces de crear nieve artificial. De esta forma veremos cómo funciona la ósmosis, un fenómeno físico que afecta a las propias células de nuestro cuerpo. Es un experimento sencillo y muy divertido que se puede hacer con niños de hasta 5 años que podrán jugar con una sustancia muy parecida a la nieve (en apariencia pero no en temperatura) y con la que podrán crear un muñeco de nieve.
Si los niños son pequeños, se recomienda contar con la supervisión de un adulto para manipular los pañales. Por supuesto, la ósmosis es un concepto más adecuado para niños de más de 10 años.
Con un pañal y agua, has creado nieve artificial en segundos sin necesidad de utilizar un congelador. Esta nieve falsa no tiene nada que ver con la escarcha, los cubitos o los cristales de hielo. Aún más increíble porque el agua desapareció sin congelarse. Pero, ¿adónde fue a parar?
El polvo que sacaste de los pañales es especial. Si pudieras verlo a escala atómica, observarías que estos granos de polvo blanco son esponjas microscópicas. Como las esponjas de baño, pueden absorber enormes cantidades de agua. Por eso se utilizan en los pañales para absorber la orina de los bebés.
Estas esponjas en miniatura están formadas por moléculas gigantes llamadas polímeros. Puedes imaginártelas como enormes espaguetis cocidos. En este experimento, el polímero se llama "poliacrilato de sodio" y ahora hablaremos de su finalidad.
Si se hincha tanto, es por el fenómeno de la ósmosis. ¿Qué es la ósmosis?
Las mini esponjas están hechas de polímeros, pero también contienen sal. En concreto, sodio. Este sodio queda atrapado en el interior de las esponjas. Es el responsable de la hinchazón.
De hecho, el agua del grifo es agua blanda. Casi no contiene sodio. Así que hay una diferencia en la concentración de sodio entre el agua que añades y lo que hay en las mini esponjas. A la naturaleza no le gustan los desequilibrios. Como resultado, las partículas absorberán más agua para diluir el sodio atrapado en el polvo. Los químicos llaman a esto el fenómeno de la ósmosis.
Como las esponjas, el polvo se hincha pero no se disuelve. Las enormes cadenas de polímeros están unidas por nudos. Así que cuando se añade agua, el polvo blanco se hincha y la retiene. Muy inteligente, ¿no?
La capacidad de absorción de esta sustancia química es tan eficaz que algunos agricultores la utilizan para retener el agua en el suelo. Sobre todo es usada en países áridos y calurosos, para evitar la evaporación del agua.
Las diminutas perlas absorben el agua y luego riegan las plántulas. Como el agua no se evapora, el agricultor necesita regar menos sus cultivos. Una gran idea para reducir el desperdicio de agua.
Fuente: ⚓ CurioKids